MATEO LUNA ASEFF  Y LA SANA COSTUMBRE DE SUMAR TÍTULOS INTERNACIONALES

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El nadador comodorense otra vez logrando medallas para la Argentina

El nadador comodorense integró la Selección Argentina de Juveniles B que compitió en la Copa Pacífico y la Copa Julio Maglione de Natación. El integrante del Equipo Municipal de Comodoro tuvo un gran desempeño en Cochabamba, Bolivia, y contribuyó con seis medallas.

Mateo Luna Aseff vivió otra magnífica experiencia internacional al ser parte de la Selección Argentina de Juveniles B (16-18 años) en Cochabamba, Bolivia.

En esa categoría, el seleccionado finalizó en el primer puesto de la XLIII edición de la Copa Pacífico, en la cual también logró un subcampeonato general. A su vez, obtuvo el subcampeonato general de la XIX Copa Julio Maglione.

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Sí, la verdad que sí, otra vez representando a la selección, otra vez muy contento de esta convocatoria. Y más en esta Copa Pacífico, que también es un torneo importante.

-Bueno, lindo traerse podio, medalla, no es cosa de todos los días, ¿no? Aunque vos ya te estás acostumbrando.

-La verdad que sí, no es cosa de todos los días, pero sí conlleva un gran esfuerzo. Y nada, más que nada traerse un recuerdito de lo que fue ese torneo me pone muy contento. No solo es el esfuerzo de ahora, sino que es el esfuerzo de muchos años.

Y de lo que obtuviste en los podios y las medallas, ¿estabas cerca de lo que habías entrenado, de tus marcas en esas distancias, mejores, todavía quedó algo para tirar ahí?

-No, yo creo que no. Es más que nada el esfuerzo y la dedicación. Hay que meterle tiempo y es un trabajo muy grande el que se hace para entrar en la selección.

-Y de las medallas que conseguiste, ¿cuál fue la más complicada, la más peleada?

-Obviamente mis pruebas fueron 100 y 200, en el absoluto salí segundo, en las dos pruebas de 100 y 200 salí segundo. Esas fueron las más complicadas, ya que quería pelear el primer puesto. Y bueno, en los 100 pechos fueron por centésimas y en los 200 fueron por dos segundos.

Más que nada la de 200 por el tema de la altura y hubo chicos que abandonaron esa prueba. Así que yo creo que las pruebas de 100 y 200 pechos fueron las más duras. Después con los relevos también teníamos la presión de ganar, pero dentro de todo la de 100 y la de 200, más que nada por el clima, ya que se corría una final y había que estar al 100% concentrado, yo destaco esas dos.

-Y de los tiempos que metiste en 100 y 200, ¿eran los tiempos habituales tuyos? ¿Fueron mejor de lo que habitualmente metés en las competencias nuestras?

-En pileta larga, nosotros acá en la provincia estamos acostumbrados a competir en pileta corta. Allá fue un torneo en pileta larga, en pileta de 50 metros, y dentro de todo fue un esfuerzo, se ve que se notó el esfuerzo. Bajé un segundo, que es cosa que vengo trabajando hace dos años en ese tiempo.

Bajé de 1’7 a 1’6 en los 100 pechos y después en los 200 bajé casi 10 segundos. Pero fue algo trabajado no solo de meses, sino durante años.

-¿Y los récords sudamericanos, mundiales en 100 y 200 tan lejos?

-Los récords sudamericanos no sé si tan lejos, se tiene que hacer un esfuerzo, pero tiene que ser un esfuerzo muy grande. Y las marcas para los mundiales y los olímpicos dan un toquecito bastante lejos, pero no imposibles, pero sí, con un gran esfuerzo. Un esfuerzo no un sacrificio, vendría a ser la palabra.

-Mateo, ¿cómo fue el tema de lo que tanto se habla y que sufre la mayoría de los deportistas en hablar de la gente común con el tema de la altura, del apunamiento y lo demás?

-Yo la verdad que lo manejé bastante bien, no fue tan complicado, ya que fue básicamente mantenerse hidratado, cosa que ya todos los deportistas de alto rendimiento tenemos que saber. Estar tomando agua todo el tiempo, no jugarse tanto la cabeza, porque al ponerse nervioso uno empieza a tomar más oxígeno del habitual. Yo personalmente no me afectó tanto, también agradezco al Gimnasio Municipal 1 que ahí tiene una cámara hiperbárica, cámara de oxígeno.

Eso lo tomé como 4 o 5 días antes y me ayudó bastante, yo creo que también fue eso, un poquito de ayuda en eso. Pero dentro de todo fue básicamente tomar agua y mantenerse hidratado, porque entre el calor y la altura obviamente uno dice, se juega más la cabeza y que otra cosa. Hubo compañeros también que tuvieron que abandonar muchas pruebas, porque le jugó más que nada la cabeza, no fue ni la altura ni nada de eso y le jugó mucho la cabeza.

Pero dentro de lo personal yo re bien, bastante bien, no me afectó ni nada.

-Mateo la historia está plagada de deportistas que al cambiar el agua de un país a otro, inclusive dentro de la Argentina han tenido problemas estomacal y ni hablar de la alimentación. ¿Cómo fue el tema? ¿Se llevaron su propia agua, confiaban en el agua de ahí, en la comida?

-Nosotros por suerte estábamos alojados en un hotel bastante bueno, para no decir que de muchas estrellas, bastante bueno. Que dentro de todo los profesores nos compraban botellas de agua, teníamos para recargar agua, la alimentación, más allá de que sea otro país de distintas culturas, dentro de todo bien, cumplía con las normas de los nutricionistas. Pero con nosotros en ese tema no tuvimos problemas, estuvo dentro de todo bastante bien.

-¿Después del final del torneo hubo algo permitido en cuanto a bebida y comida o seguían estricto como el primer día?

-No, no, siempre estricto. Alcohol ni en pedo jeje…. Y después otra cosa, creo que lo mejor que llevamos a comer de postre fueron heladas de frutilla, pero eso fue el último día después de competir.

-¿Y ahora qué te queda de acá a fin de año?

-Acá que termine el año, este fin de semana tenemos lo que viene siendo el último provincial y con eso ya completo todo mi año, ya vendría a ser toda mi competencia.

-¿Y el año que viene se sabe algo ya de dónde arrancan o todavía no?

El año que viene me duele decir esto, ya que este es mi último año, pero como este es mi último año de secundario y me quiero ir a estudiar a otra ciudad, ojalá que el tiempo me lo permita y quiero seguir nadando. Ya me fui a probar el equipo de Villa Mitre de Bahía Blanca y dentro de todo eso voy a seguir compitiendo, voy a tratar de seguir nadando porque el cuerpo lo necesita, yo también lo necesito y también es algo que me gusta.

-¿Y lo que vas a estudiar en Bahía no hay en Comodoro o obedece a otra decisión ir a Bahía?

-Dentro de todo yo tengo familia allá, así que creo que se me facilitan muchas cosas al tener familia allá. Aparte no es una ciudad tan grande como lo es Buenos Aires, Córdoba, Rosario, pero también tiene muchas oportunidades, cosas que ahora se están dando.

-Bueno, vas a poder comer mucho helado de frutilla entonces, ya ves lo que decidas.

-Sí, apenas llegué ya me di varios permitidos.

-Bueno, contame quién es la gente que dio una mano de la forma que sea para poner la Argentina ahí como siempre bien arriba.

-Yo agradezco a todos, a mis viejos también que me acompañaron, a muchos amigos que me estuvieron viendo. Más que nada a Hernán Martínez, al Ente Comodoro Deporte, a Chubut Deporte, a la FENACH. Toda esa gente que sinceramente si no estuvieran ahí yo no hubiera podido viajar.

El torneo era autofinanciado y gracias a ellos yo pude viajar y estar representando a la Selección.